miércoles, 17 de julio de 2013

Juan Ramón Jiménez (1881- 1958)

"Era andaluz, de Moguer, donde se conserva su casa y murió en Puerto Rico, después de pasar mucho tiempo en este país. Se fue de España al empezar la Guerra Civil y empezó viviendo en Estados Unidos, después fue reclamado por Jaime Benítez, gran benefactor de la cultura española,  para la Universidad de Puerto Rico. Pasó muchos años allí, dando conferencias en su universidad. Se creó un centro en homenaje a su esposa Zenobia Camprubí y al propio Juan Ramón Jiménez, lugar de recopilación de sus escritos y recuerdos.
En la Universidad de Puerto Rico, Juan Ramón Jiménez recibió la noticia de la concesión del premio Nobel que quiso lo fuera a recibir Jaime Benítez.



Juan Ramón Jiménez era un hombre en muchos sentidos curioso. Hombre con sensibilidad psíquica exagerada, terriblemente aprensivo, tenía que tener siempre médicos a su alrededor, residió largas temporadas en Madrid en el sanatorio del Rosario. Era enormemente suspicaz, le molestaban los olores, el fumar, el perfume de las mujeres. Todo esto le ocasionó a lo largo de su vida muchas complcaciones. Era vanidoso.
Empezó a escribir muy joven, coincidió con alguno de los autores de la generación del 98, por ejemplo Machado, del que fue muy amigo. Su obra es bastante extensa, pues además de gran poeta era un excelente prosista. Era mordaz, maligno y con gran suspicacia. Se peleó con mucha gente.
Los poetas jóvenes se entusiasmaron con Juan Ramón Jiménez y se olvidaron de Machado, luego se peleó con ellos.
Su prosa es muy aguda, muy crítico: Su obra cumbre es Platero y yo.
Su poesía es muy perfeccionista, continuamente corregida, lo que hace perder la espontaneidad.
En sus primeras fases está influido por el modernismo, para hacerse más sencilla. Los mejores poemas son los que publica entre 1910 y mil novecientos ventitantos, lo que es su segunda Antología Poética, con un lirismo acentuado y creador. Sus últimos años complican su poesía y no llegan al nivel anterior. 
Su libro principal es Platero y yo, de breves capítulos. Es autobiográfico pero con una forma narrativa nueva, un ir más allá del continente descubierto por Cervantes. Como el caso de Unamuno, Azorín o Valle-Inclán.

Platero es un burro, que es personaje de la narración, lo mismo que las visiones de cada capítulo, con la creación de un género narrativo nuevo. Como escribió Marías en su ensayo "Platero y yo o la soledad comunicada". Hay una comunicación entre un hombre y un animal. La convivencia de Juan Ramón y Platero. Es la comunicación de la soledad con el burro y a veces con los niños. Comunicación sin perder la soledad. Surgen formas de vida andaluza sin perder la soledad, en 
compañía de Platero. Asombrosa creación literaria. Se hizo una edición para niños. Libro lleno de lirismo y poesía con un realismo a veces duro, con una mirada sobria.
Escritor de una gran capacidad creadora, a veces implacable.
Puerto Rico ha quedado marcado por su presencia.
Ha habido un movimiento de desvío sobre su obra, a algunas personas le molestó que le dieran el premio Nobel. Que no se lo hubieran dado si viviera en España. No se lo reconoce su mérito. Sus libros consiguen superar la prueba de la relectura. Que con la prueba de las Obras Completas son las necesarias para valorar a los grandes autores. Con las Obras Completas se comprueba la innovación o la repetición de los aciertos iniciales, los autores poco creadores aparecen como reiterativos y sus obras desmerecen.
Juan Ramón Jiménez resiste la prueba de la relectura y las Obras Completas. Autor precoz, más vivo de lo que parece a pesar de estar eludido. Su lectura ha de hacerse desde la altura de edad de cada lector, su relectura hace cambiar su sentido según los años del que lee.
Es la figura capital de la generación de Ortega. Hoy está casi olvidado, pero que es necesario conocer para llegar al nivel del siglo. Esta esperando una efectiva resurrección".

Del capítulo sobre Juan Ramón Jiménez en el curso "Antepasados vivos", realizado en los años 1998 y 1999 por Julián Marías. 

26 10 1956 Portada del ABC
26 10 1956 Reseña de ABC sobre la concesión del Premio Nobel
07 06 1958 ABC Poesía esencial, sobre la muerte de Juan Ramón, por M. Fernández Almagro

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